5 puerros grandes
150g de queso de cabra fresco
1 base de masa quebrada
4 huevos
50gr de emmental
200ml de nata líquida 33%
100ml de leche
Aceite de oliva virgen extra
Pimienta negra
Sal
Elaboración
Forramos un molde de tarta con la masa quebrada, pinchamos el fondo, colocamos unos pesos y horneamos en blanco en posición media del horno, a 200ºC, durante 10 minutos. Reservamos.
Cortamos los puerros en rodajas finas. Rehogamos en una sartén con un poco de aceite y sal, hasta que comiencen a ablandarse, que tengan textura y mantengan el color. Batimos los huevos, salpimentamos y mezclamos con la nata y la leche. A esta mezcla, le añadimos un poco de queso de cabra desmenuzado, guardamos alguna rodaja para poner encima, añadimos también el puerro rehogado, y toda esta mezcla la vertemos en la base medio horneada.
Por encima esparcimos el queso emmental y las rodajas de queso de cabra que hemos guardado.
La quiche ya está lista para que la introduzcamos en el horno, previamente calentado a 180ºC, durante 20 minutos.
Pasados los 20 minutos sacamos del horno y dejamos enfriar antes de cortar y servir.
El puerro y queso de cabra son dos ingredientes que combinan a la perfección, y más aún si los integramos en esta preparación con una masa crujiente, nata y huevos.