Después de muchos
meses y algún año de inactividad, quiero dar un merecido homenaje a la
provincia de Cádiz, la cual tuvimos el placer de visitar hace un año mi marido
y yo. Aunque con un poco de retraso, la experiencia creo que merece la pena ser
compartida.
El mes
escogido la visita fue marzo, y aprovecho para deciros que aunque la
probabilidad de lluvia es mayor, la temperatura, y la pre-semana santa, es
decir, la menor aglomeración de gente y la preparación de los comercios y
restaurantes para tan importante acontecimiento en el sur de España, hace que
puedas disfrutar de casi lo mismo que en semana santa o verano, pero con menos
gente.
La primera etapa fue
en Jerez de la frontera, donde visitamos el
Tabanco El Pasaje, que es la más conocido y antiguo de la ciudad, y además
sirve vinos de la bodega Maestro Sierra, que es de las mejores. Pero que es un
tabanco?. Es una taberna típica de esta zona donde puedes beber y comprar vinos
de jerez a granel y comer alguna cosa, como jamón por ejemplo. Imprescindible
visitarlo si vas a Jerez de la Frontera y probar sus vinos y tapas.
Estuvo lloviendo casi todo el día, pero eso no nos impidió disfrutar de la gastronomía de esta región. Y llegamos a Casa Bigotes. Primero comenzamos con la taberna, que está al lado del restaurante y es donde comenzó este negocio. Probamos unos chocos, que no tienen nada que ver con los que te puedes comer en cualquier bar de Barcelona, por ejemplo. El secreto está en la temperatura del aceite, que es muy alta y sobre todo, en la harina especial que utilizan para freírlos. Seguidamente y unas manzanillas después, fuimos al restaurante, que está a solo unos pasos. Probamos el cazón en adobo.
El cazón, es un pez de la familia de los escualos o tiburones, que se encuentra fácilmente y a buen precio en los mercado, si bien, la mayoría de las veces proviene de congelado. Su carne blanca y jugosa, es idónea para consumir rebozada en tacos o delicias, pero su sabor mejora mucho si previamente se adoba. Probamos varios platos de pescado, evitando el "pescaito" frito, ya que al mediodía en Casa Balbino ya nos llevamos lo nuestro. Asi que nos decidimos por platos algo mas elaborados, y no nos equivocamos. El camarero que nos atendió sabía de lo que hablaba y su educación y amabilidad nos encandiló. La experiencia fue buenisima, la verdad es que los fritos y cocinados de pescado de este restaurante son insuperables y de primera calidad.
También probamos un estupendo Tataki de atún rojo de almadraba, unas almejas finas a la marinera, un rape almendrado con salsa de setas. Así que salimos rodando.
Este
restaurante se diferencia de los anteriores, por su modernidad en la cocina,
que aunque tenga una base clásica, su carta ofrece platos de influencia
japonesa y de otras regiones de la península. Su decoración, huye de los motivos
religiosos y marineros y le da al local un ambiente más elegante y moderno,
pero para nada frio. El precio no pasó de los 100 euros. Por lo que la relación
calidad precio, la consideramos muy buena.
Nosotros nos decidimos por el menú degustación del atún rojo, que es la especialidad de la casa y no pasaba de los 40 euros por persona. Aprovechamos la nada habitual carta de vinos en esta región del restaurante, ya que era bastante moderna y con referencias de todo el pais. Probamos un Ossian 2009 (un verdejo de D.O. Rueda con crianza) y un cava Juve i Camps milesimé reserva de la familia. Todo sugerido por David, y maridó a la perfección con la comida. Aunque no es aconsejable este menú para cenar, por lo graso del atún, nosotros estábamos del todo decididos. La peculiaridad del menú llega al extremo cuando te traen la piruleta de huevas de atún, que no es otra cosa que el órgano sexual del atún macho cargado de semen y aderezado con mermelada de cebolla. El camarero ya nos advirtió sobre este plato, que aunque sea una delicatesen, yo no tuve el valor de probar, y aunque David si lo hizo, me comentó que no era nada recomendable. Todo estaba esquisito,y con razón este restaurante se considera el mejor de España para comer atún rojo. Aprovechando nuestro paso por Barbate, a la mañana siguiente compramos conservas de atún rojo de almadraba en la tienda museo de conservas de Cádiz. Allí encontramos conservas de atún de todo tipo y a un precio espectacular.
La segunda visita en
Jerez de la Frontera fue al Bar Juanito, otro imprescindible de la ciudad
donde se pueden degustar más de 50 tapas distintas. Este restaurante es
conocido principalmente por sus alcachofas cocidas , las cuales se sirven desde
hace mas de 60 años y han recibido varios premios. La verdad es que están
riquísimas.
Al día
siguiente, antes de ir a Sanlúcar de Barrameda, visitamos las bodegas González Byass, donde entre otras cosas
podrás ver la veleta más grande de España, con suerte un ratoncillo bebiendo un
poco de vino y viejísimas barricas con dedicatorias de las más dispares
celebridades del siglo XX. Merece la pena conocer el proceso de producción del
maravilloso vino de jerez. Un vino exclusivo en el mundo, y que por su precio,
es en el mundo, uno de los mejores en relación calidad precio. Si os
gusta el vino y queréis probar algo que recordaréis para siempre, no dejéis de
visitar las bodegas Maestro Sierra y
haceros con una botella de Pedro Ximenes de la serie viejísimos. Según mi
marido, que sabe de lo que habla, es uno de los mejores vinos que ha probado
jamás, y no llegaba a costar 60 euros!
Siguiendo la ruta
que teníamos prevista, llegamos a Sanlúcar, donde por supuesto, visitamos, como
lo han hecho innumerables personalidades, Casa
Balbino, y probamos la mejor tortilla de camarones de mi vida, y manzanilla
y finos y langostinos y....muuucho mas, y todo con un servicio más que
profesional, y a un precio sorprendente. Pero Sanlúcar tiene otro pilar en lo
que a restaurantes se refiere, y ese es
Casa Bigotes, donde reservamos mesa para cenar.
Estuvo lloviendo casi todo el día, pero eso no nos impidió disfrutar de la gastronomía de esta región. Y llegamos a Casa Bigotes. Primero comenzamos con la taberna, que está al lado del restaurante y es donde comenzó este negocio. Probamos unos chocos, que no tienen nada que ver con los que te puedes comer en cualquier bar de Barcelona, por ejemplo. El secreto está en la temperatura del aceite, que es muy alta y sobre todo, en la harina especial que utilizan para freírlos. Seguidamente y unas manzanillas después, fuimos al restaurante, que está a solo unos pasos. Probamos el cazón en adobo.
El cazón, es un pez de la familia de los escualos o tiburones, que se encuentra fácilmente y a buen precio en los mercado, si bien, la mayoría de las veces proviene de congelado. Su carne blanca y jugosa, es idónea para consumir rebozada en tacos o delicias, pero su sabor mejora mucho si previamente se adoba. Probamos varios platos de pescado, evitando el "pescaito" frito, ya que al mediodía en Casa Balbino ya nos llevamos lo nuestro. Asi que nos decidimos por platos algo mas elaborados, y no nos equivocamos. El camarero que nos atendió sabía de lo que hablaba y su educación y amabilidad nos encandiló. La experiencia fue buenisima, la verdad es que los fritos y cocinados de pescado de este restaurante son insuperables y de primera calidad.
Después de visitar los
bonitos pueblos blancos, al siguiente día dimos una vuelta por Cádiz. Allí disfrutamos
de la calidad y buen servicio del restaurante
Balandro. Comimos de nuevo "pescaíto" frito, y es que en esta
región es una constante, tanto el oriundo como el foráneo no pueden resistirse
a comerlo. La atención del personal en este restaurante era excelente
y hicieron que nuestra visita se prolongara durante horas.
También probamos un estupendo Tataki de atún rojo de almadraba, unas almejas finas a la marinera, un rape almendrado con salsa de setas. Así que salimos rodando.
Por la tarde nos
fuimos a Vejer de la Frontera, un pueblecito precioso, donde descubrimos la carnicería Paco Melero, el aroma que
desprende al pasar por delante te invita a entrar, y la simpatía de la familia
Melero, hará que la espera mientras te atienden sea de lo más divertida. Al parecer todos los miércoles por la mañana realizan por lo menos 25 kilos de un guiso que se hacia para almorzar en las matanzas de los cerdos, con las carnes del animal que no servían para hacer embutidos. Como la lengua, el hígado o el corazón, lo que se llama "manteca colorá". Es una referencia para los amantes del cerdo ibérico, y si quieres puedes contactar con ellos a través del facebook y realizar compras a muy buen precio.
Al día
siguiente en Arcos de la Frontera pudimos comprar unos dulces típicos en un
convento de las Mercedarias descalzas, no nos entusiasmaron demasiado, ya que
estaban algo secos.
Después de estos festivales gastronómicos
gaditanos, no podíamos acabar nuestro
tour por esta región sin visitar Barbate y su famoso restaurante El Campero, donde el atún rojo de
almadraba se elabora de mil formas distintas. Comer o cenar en el campero es
una experiencia que no se os olvidará jamás. Aunque la mejor época para
visitarlo es justo antes del verano, justo después de la levantá (pesca del
atún de almadraba) que es en los meses de abril y mayo, cualquier momento puede
servir de excusa para visitar este gran restaurante, donde además del atún rojo
de almadraba puedes encontrar todo tipo de pescados y mariscos de la mejor
calidad.
Nosotros nos decidimos por el menú degustación del atún rojo, que es la especialidad de la casa y no pasaba de los 40 euros por persona. Aprovechamos la nada habitual carta de vinos en esta región del restaurante, ya que era bastante moderna y con referencias de todo el pais. Probamos un Ossian 2009 (un verdejo de D.O. Rueda con crianza) y un cava Juve i Camps milesimé reserva de la familia. Todo sugerido por David, y maridó a la perfección con la comida. Aunque no es aconsejable este menú para cenar, por lo graso del atún, nosotros estábamos del todo decididos. La peculiaridad del menú llega al extremo cuando te traen la piruleta de huevas de atún, que no es otra cosa que el órgano sexual del atún macho cargado de semen y aderezado con mermelada de cebolla. El camarero ya nos advirtió sobre este plato, que aunque sea una delicatesen, yo no tuve el valor de probar, y aunque David si lo hizo, me comentó que no era nada recomendable. Todo estaba esquisito,y con razón este restaurante se considera el mejor de España para comer atún rojo. Aprovechando nuestro paso por Barbate, a la mañana siguiente compramos conservas de atún rojo de almadraba en la tienda museo de conservas de Cádiz. Allí encontramos conservas de atún de todo tipo y a un precio espectacular.
Hasta aquí nuestra ruta gastronómica Gaditana. Espero que
os haya gustado la explicación.
Un saludo y hasta la nueva experiencia gastronómica.
Harinas especiales
para freír pescado:
www.harinassp.es
Restaurantes:
www.tabancoelpasaje.com
www.bar-juanito.com
www.casabalbino.com
www.restaurantecasabigote.com
www.restaurantebalandro.com
www.restauranteelcampero.es
Tiendas:
es-la.facebook.com/carniceria.pacomelero
www.facebook.com/conservasdecadiz